El comercio a través de internet ha transformado los modos de contratación entre vender y comprar. Los beneficios son múltiples pues se pueden ahorrar los costos de transacción como son el personal, costos de ida y venida, tiempo, etc.
Sin embargo, cabe destacar que no es una novedad el comercio electrónico, ya en otros países es cotidiano y totalmente común comprar productos o servicios por la red, asimismo hace poco que se ha profundizado más en Latinoamérica y en el Perú aparentemente se encuentra en un acrecentamiento de las cifras, ya que se estiman más de 240 mil personas realizan este tipo de actividades.
En ese sentido, para que los peruanos incrementen sus operaciones por internet, quiere decir que el mercado ha generado un nivel de confianza a tal punto que los consumidores utilizan o buscan las formas más idóneas de contratación en el ciberespacio.
Obviamente, el consumidor ahora tiene una actitud de confiar en sus proveedores de bienes y servicios por lo que se debe hacer énfasis también en los fiscalizadores de estos movimientos, pues se podría suscitar un libertinaje por la red que repelería los logros adquirido en cuanto a este comercio.